En ese escudo aparecen esculpidoslos emblemas heráldicos de los Navia, Lantoira, Cuervo, Montenegro y Avilés.Estos apellidos se fueron acumulando en la familia propietaria. El edificio secorresponde con otro ubicado en el número 11 de la calle de las Armas, que lucetambién escultura emblemática en la que se aprecia un guerrero dotado dearmadura. Históricamente, ambas edificaciones están relacionadas con elmarquesado de Santa Cruz.
Hijo de padres santanderinosafincados en la villa, Don Juan Trueba y Cano nació y murió en Navia en 1831 y1881, respectivamente. A los 16 años comenzó a estudiar la carrera sacerdotalque concluyó a los 25 años tomando posesión de la parroquia en 1858. Estudiófrancés e italiano, se rodeó de una buena biblioteca y emprendió un viajefabuloso para aquellos tiempos (París, Versalles, Lourdes, Florencia, Milán,Parma, Turín, etc) que ampliaría extraordinariamente su horizonte cultural. Devuelta a Navia, con la salud ya quebrantada y preocupado y decepcionado con elestado deplorable y arruinado de la iglesia centenaria de la plaza, decidiólegar toda su cuantiosa fortuna para la construcción de un nuevo temploparroquial, que se inauguró el 30 de octubre de 1895.
Sus restos mortales reposan en lanave central izquierda de la iglesia de Santa María de la Barca con una lápidade mármol recordatoria de su gesto.